Cos Borbolla, Manuel de (1920-2017)

Cos, Jesús de (1957-)

Gallego, Óscar

Grabado en Madrid el 21 y el 22 de mayo de 2004.

Videocasete "TDK E-HG Extra High Grade VHS". La caja tiene una etiqueta manuscrita por Manuel de Cos: "Comparsa en Sol y Plaza 2 de mayo contra la Boda y en Rábago comida mujeres 21 y 22-5-04 464". En la cinta hay otras dos etiquetas manuscritas por él, en las que aparece el mismo texto (etiqueta frontal y lateral).

La grabación comienza los días 21 y 22 de mayo con las manifestaciones en contra de la Boda Real entre Felipe de Borbón y Letizia Ortiz. Bajo lemas como “los Borbones a los tiburones”, “España, mañana, será republicana”, “ley de extranjería, para la Reina Sofía” o “lo que cuesta el principito, para un metro gratuito”, los manifestantes hablan sobre el próximo enlace y agitan pancartas contra la Monarquía Española. Se abordan temas como los valores reaccionarios, el “derroche” de dinero público, la precariedad laboral, la manipulación de las informaciones emitidas sobre el 11-M, la consulta social, la emancipación de los pueblos o la democracia. “¡No somos súbditos, somos ciudadanos!”, exclama Óscar Gallego entre otros comentarios de manifestantes anónimos. La grabación acaba en Rábago, con una Comida de Mujeres, un acto organizado por la Asociación Cultural Femenina de Herrerías, en el que se reúnen sus miembros para realizar una comida de la que Manuel de Cos dice “cuando a tantos seres humanos no les alcanzan, las migas que tiráis es un derroche”.

Tanto la grabación de las manifestaciones, como la de la comida, están realizadas con cámara en mano, por lo que la estabilidad de la imagen no es muy buena, el eje varía constantemente, los movimientos no son limpios y hay subidas y bajadas de cámara que se unen al comportamiento físico de Manuel de Cos. En ambas grabaciones predominan los planos medios y cortos, siendo los planos detalle de largas secuencias característicos de la filmación de las manifestaciones. El sonido es bueno, más nítido en la grabación realizada en Rábago. Los tonos y la luz marcan la diferencia. En las manifestaciones priman los colores cálidos (anaranjados) y una luz abundante (a veces quema), mientras que la comida tiende más a colores fríos (grisáceos) y una luz más plana (estabiliza los contrastes).