Fábrica de chocolates de Evaristo Juncosa

Chocolates de Matías López

Chocolates Amatller

Están ilustrados con escenas y figuras infantiles: jugando, haciendo deporte, disfrazados, montando diversos animales, vestidos de época, tocando un instrumentos o vendiendo un periódico (El Imperial, Le Monde, The Times). Algunos cromos tienen la misma imagen pero con diferente publicidad

Estos cromos con publicidad eran un obsequio de los comerciantes que los regalaban en sus establecimientos a sus clientes y de los fabricantes, especialmente de chocolates, que los incluían en sus productos destinados principalmente a niños

La mayor parte de los cromos no presenta publicidad aunque cuando la tienen mayoritariamente se trata de fábricas de chocolate, impresa o estampada con sello a tinta, normalmente en el verso, aunque en algunos casos está sobre la imagen. También se mencionan la calidad y variedad de los productos de estas marcas, recomendaciones y premios obtenidos. Entre estas marcas y productos figuran las siguientes: Chocolates de Matías López, de El Escorial, Chocolates Amatller, de Barcelona, Chocolates Juncosa, de Barcelona, Chocolates y Cafés Venancio Vázquez, de Madrid, El Barco de Hijos de José Gómez, de Valencia, La España, de Madrid, La Española de la Viuda de Cunill, de Madrid, Compañía Colonial, de Madrid, Galletas y bizcochos Vinas y Compª, Cerería y bujías de Laureano Delclós, de Figueras y Laboratorio J.G. Espinar, de Sevilla

Las láminas corresponden a impresiones fotomecánicas

Son cromos sueltos que eran estampados en grandes pliegos y luego troquelados, quedando unidos entre sí por pestañas para ser desprendidos. Tienen diversas formas y tamaños, más de la mitad de tamaño reducido. Hay varios cromos con una tira de cartulina al verso que al abrirse les permite mantenerse en pie. Algunos cromos presentan movilidad. Presentan barniz y relieve. Estampas y láminas sobre papel y cartulina