Mao Zedong, a veces transliterado también como Mao Tse-Tung o simplemente Mao (en chino tradicional, 毛澤東; en chino simplificado, 毛泽东; pinyin, Máo Zé Dōng; Wade-Giles, Mao² Tsê²-tung¹; (?·i), Shaoshan, Hunan, 26 de diciembre de 1893 - Pekín, 9 de septiembre de 1976), fue un político, filósofo, Intelectual, estratega militar y dictador chino;​​​​​​ otras fuentes, como Simone de Beauvoir en su libro La larga marcha, o como Deng Rong en su libro Deng Xiaoping y la Revolución Cultural​afirman que no fue un dictador o no lo califican con ese término.​​​​​ Fue fundador y máximo dirigente del Partido Comunista de China (PCCh), así como fundador y presidente de la República Popular China. Bajo su liderazgo el Partido Comunista confrontó la política de exterminio anticomunista del Partido Nacionalista en la primera parte de la Guerra civil china (1927-1936) —durante la cual condujo la Larga Marcha—, impulsó el Segundo Frente Unido para luchar contra la ocupación japonesa y luego venció a la dictadura de Chiang Kai-shek en la Revolución china de 1949, proclamando una nueva república, bajo un régimen de «dictadura democrática popular»,​ con hegemonía del Partido Comunista, que reunificó China y puso fin al Siglo de la humillación. Se le asignó responsabilidad en la Gran hambruna de 1959-1961, razón por la cual fue temporalmente apartado del poder.​ En el plano ideológico, Mao asumió los planteamientos del marxismo-leninismo, pero con matices propios basados en las características de la sociedad china. En particular, el maoísmo otorga un papel central a la clase campesina como motor de la revolución, planteamiento que difiere de la visión tradicional marxista-leninista de la Unión Soviética, que veía a los campesinos como una clase con escasa capacidad de movilización y adjudicaba a los trabajadores urbanos el papel central en la lucha de clases. Mao se diferenció de la ideología soviética y consolidó su liderazgo dentro del PCCh durante el Movimiento de Rectificación de Yan'an (1942-1945).​ Su presidencia,​ dictadura,​ liderazgo, revolución, gobierno o conducción, según los diferentes calificativos que se utilizan, se caracterizó por recuperar la unidad e independencia del Estado chino luego de un siglo de fracturas territoriales y pérdidas de soberanía a manos de las potencias occidentales y Japón, así como por intensas campañas de reafirmación ideológica, que provocaron grandes conmociones sociales y políticas. En los primeros años creó el Ejército Popular de Liberación, llevó a cabo la reforma agraria de China, la campaña para suprimir contrarrevolucionarios y las Campañas Tres Anti y Cinco Anti, además de obtener una victoria psicológica en la Guerra de Corea, restablecer relaciones con Estados Unidos y lograr el reconocimiento de las Naciones Unidas. Entre 1953 y 1958, implantó la economía planificada y la , impulsó la industrialización de China e inició el proyecto «Dos bombas, un satélite». Entre 1955 y 1957, Mao impulsó el Movimiento Sufan y el Movimiento antiderechista, saldándose este último con unas 550 000 personas perseguidas, la mayoría intelectuales y disidentes.​ En 1963 lanzó el Movimiento de Educación Socialista y en 1966 inició la Revolución Cultural, que le permitió recuperar el poder y desarrollar un culto a su personalidad. Luego de dar por finalizada la Revolución Cultural en 1969, Mao experimentó serios problemas de salud que le impidieron ejercer el poder en plenitud, abriéndose una lucha dentro del Partido Comunista que recién se resolvería luego de la muerte de Mao, con la consolidación del liderazgo de Deng Xiaoping y su nueva política económica.​ Aún hoy en día, el papel histórico de Mao es objeto de controversia. Por una parte, jugó un papel determinante en la resistencia a la ocupación japonesa y reunificó China poniendo fin al Siglo de la humillación, que hundió al país en la pobreza y la adicción masiva al opio y lo puso al borde de su desintegración. Durante su gobierno, entre 1949 y 1975 la esperanza de vida aumentó de 44 a 65 años.​ La tasa de alfabetización subió del 15 % en 1949 al 65 % en 1982.​ Entre 1949 y 1976, el PIB per cápita pasó de $637 en 1950 a $1272 en 1975,​ lo que supone un crecimiento económico en PIB per cápita durante su período (1950-78) de casi el 100 %.​​ Sus políticas ideológicas están asociadas con las persecuciones, violaciones masivas de derechos humanos y el trabajo penitenciario.​​​​ Algunas fuentes lo califican negativamente con adjetivos como «dictador»,​ «tirano sanguinario»,​ o «genocida».​​​​​​ Otras fuentes lo valoran positivamente utilizando conceptos como «líder»,​ «arquitecto de la nueva China»,​ «estadista»,​ «gran timonel»,​ «padre de la patria»,​ «padre de la China socialista»,​ «gran revolucionario proletario»,​​ entre otros. En 1981 el Partido Comunista de China publicó un análisis oficial sobre la responsabilidad de Mao en los problemas sociales y económicos derivados de sus políticas, en el que se le achacaban errores graves, pero reconociendo también que sus éxitos superan con mucho sus errores, especialmente su papel decisivo como ideólogo socialista, como líder del Partido Comunista y como artífice de la Revolución china. Desde entonces, el Partido Comunista de China ha mantenido esta valoración histórica de Mao como un gran líder patriótico y fuente de legitimidad del propio partido, pero sin negar los errores que cometió.​ Fuera de la República Popular, las valoraciones de Mao varían desde la visión positiva que lo muestra como un líder popular y revolucionario, hasta la visión negativa de su etapa en el gobierno como un caso de autoritarismo, poder dictatorial y comunismo.​

Mao, Zedong (1893-1976)

Año de nacimiento:

1893

Lugar de nacimiento:

Shaoshan

Año de fallecimiento:

1976

Categoría profesional:

Poetas, Escritores, Politicos, Filósofos,

Organismo o grupo relacionado:

Agrarismo, Marxismo-leninismo,

Enlaces relacionados:

Lengua: Chino xiang,Chino mandarín,Chino